“No podemos ser espirituales sino somos humanos” afirmó el facilitador a los sacerdotes que participaron de esta taller donde se abordaron temáticas como la vida afectiva, espiritual y social del presbítero.

40 sacerdotes de las 7 jurisdicciones eclesiásticas del Oriente boliviano, participaron esta semana del curso de formación permanente que se realiza cada año en Sana Cruz.

El tema central de la formación ha sido “la formación humana e integral del presbítero” para lo cual se contó con la facilitación del Padre Luis Valdéz, sacerdote mexicano especializado en el desarrollo humano con amplia experiencia en la formación de sacerdotes y autor de 11 libros sobre la temática.

Para el Padre Luis, “la auténtica espiritualidad, a la que está llamada el sacerdote, promueve el desarrollo de la persona para que use su potencial como debe ser” en ese sentido agrega que “no podemos ser espirituales sino somos humanos”.

En ese sentido, explica que esa tarea implica que el sacerdote se conozca es por eso que en este taller se abordan temáticas como la vida afectiva, espiritual y social del presbítero.

Para el Padre Luis el tema del desarrollo humano y el autoconocimiento personal es tan importante para ser personas sanas que de hecho afirma: “los sacerdotes somos sanadores heridos

El Presbítero subraya tres consejos para sus hermanos presbíteros:

1.- La actitud de ser alumnos y estar abiertos para aprender siempre ya que lo que se aprende en el seminario no es suficiente.

2.- “Hacernos humanos a la manera de Jesús que siendo Dios se hizo hombre. Los sacerdotes nos hacemos muy espirituales y rechazamos lo humano, no expulsemos lo humano de nuestra vida”.

3.- “Despojarnos de nuestros privilegios como lo hizo Jesús” es decir, despojarnos de la tentación del poder.