Campanas. Compartimos esta oración escrita por Isaac Sandoval Rodríguez,un intelectual y un académico con todas las letras. Se sumergió en la historia, el derecho, las ciencias políticas y la literatura. Logró desarrollar en cada una de estas áreas, de manera muy clara, temas que hoy siguen vigentes. Es un referente del pensamiento y la crítica social de una época.
Isaac Sandoval Rodríguez murió el miércoles 21 de octubre, a los 83 años. Con su partida queda el recuerdo de un ilustre cruceño y de un hombre generoso en muchos niveles, con una dimensión humana extraordinaria y un conocimiento inagotable. (Fotografía – El Deber)
Hoja Literaria, publicada en el Periódico Universitario mensaje, el 03 de junio de 1960
“Hoy los jóvenes son diferentes en su fe”
PLEGARIA
Gracias Señor, padre mío
Porque en la brega me enseñaste a ser fuerte
Y en la hora del tabor a tener fe.
Tus ojos puestos en criatura humana;
tu vida entera sangrando en la cruz,
porque al abrigo de tus palabras estoy seguro de triunfar,
en la pánica agonía del siglo yerto.
Un solo momento no vacilo de ti,
ni sentimos miedo los que luchamos por ti
al pensar en la plenitud de tu vida,
que viviste por mí.
No me quejo de ti, más bien te digo gracias,
porque me pusiste al nivel de juventudes
Y diste en mis labios el toque de una cruz,
que sangra en la prédica del diario vivir.
Gracias porque me diste valor para trabajar en tu nombre,
Y me pusiste al duro yunque de la prueba;
Porque me pusiste frente a la injusticia
Y encendiste mi sed, en mi humano pensamiento.
Gracias porque vislumbré en cada caída,
en cada resbalar por la noche ciega…
tus cárdenas miradas.
gracias porque vislumbré en cada caída,
en cada resbalar por la noche ciega…
tus cárdenas miradas.
Gracias por lo inmenso de tu amor
por lo mucho que has sido y lo todo para el mundo.
Gracias porque me acercaste a los humildes,
a los que gimen de hambre y sienten el inmenso frío de la injusticia
porque me acercaste a los perseguidos del mundo,
a los calumniados en tu nombre y a los que lloran.
Te pido Señor, que sea un arpa que suene en la noche
Y un fragor estridente que anuncie el combate.
Señor que el mundo viva tu luz
Y los hombres manejen tu historia…
Si es preciso morir, moriré por ti
Y que el mundo se estrelle contra mí por tu nombre,
Por hablar de los desposeídos de la tierra,
Por retar la inmundicia de los ricos…
Si es preciso hazlo Señor y hazme otro Cristo.
Dedicado a la Juventud Universitaria Católica JUC
