El jueves 22 diciembre una Orquesta boliviana tendrá el privilegio de ofrecer un concierto especial de Navidad para el Papa Francisco, en las dependencias del Vaticano, gracias a la influencia del Embajador Julio César Caballero.
El grupo estará dirigido por el maestro Rubén Darío Suárez Arana, junto al coro infantil de San Ignacio de Velasco que dirige el profesor Arturo Añez, ofreciendo fragmentos de la Ópera San Ignacio de Loyola.
La orquesta Hombres Nuevos tiene el apoyo de Monseñor Nicolás Castellanos, creador de la Ciudad de la Alegría, en el popular barrio cruceño del Plan Tres Mil que se caracteriza por su especial apoyo a la juventud.
Suárez Arana es nacido en Ascensión de Guarayos y ha realizado estudios en el Instituto de Bellas Artes de Santa Cruz, perfeccionado los mismos en Finaly Fergusson y Venezuela, donde se graduó en dirección de orquestas.
Durante su permanencia en Venezuela, tuvo oportunidad de dar clases a los niños de la calle y dirigir a trabajadores en los barrios de la periferia, bajo la inspiración de su maestro José Antonio Abreu.
Por su valioso aporte a la cultura, ha sido acreedor a la Cruz de la Orden Al Mérito Civil otorgada por el rey de España, Premio Bartolomé de las Casas por el príncipe Felipe de España, Premio Hans Roth, Premio Joven y premio de la Cámara Junior de Bolivia.
Sin lugar a dudas, el escuchar música de las misiones del Chiquitos permitirá al Santo Padre evocar su visita a Santa Cruz, donde el altar de estilo chiquitano que fue construido para acogerlo, se ha convertido en un lugar de atracción para los visitantes.
Recordemos que la música barroca y en especial aquella de las misiones jesuíticas, atrae la atención del público en festivales que se realizan en forma periódica y reúnen a cultores de este estilo, provenientes de todo el mundo.
Es interesante recordar que si bien los nativos del oriente recibieron el apoyo de los misioneros, por su parte ellos, luego de recibir los conocimientos básicos, fueron capaces expresar bellas obras de su creación.
Las iglesias misionales del oriente son centro importante de atracción y comprenden diversos lugares, especialmente en los departamentos de Santa Cruz y el Beni, donde se levantaron valiosas construcciones.
La presencia de esta embajada cultural en la sede del catolicismo, en momentos en que se recuerda el nacimiento del Salvador, representa un momento importante dentro de la vida de los católicos cruceños.
Este conjunto musical será embajador de los mejores deseos de todos los creyentes bolivianos para el Santo Padre, cuya labor de profundo contenido social es cada día motivo constante de elogios.
Deseamos el mayor éxito a ese grupo de artistas bolivianos que pondrá el alto el trabajo de los misioneros, tanto jesuitas como franciscanos, en la evangelización de los pueblos nativos en esta parte de América.
Sumamos nuestros saludos a los que será portador este importante grupo musical, para su santidad Francisco, gracias a la influencia de un diplomático cuya misión en la Santa Sede es producto de sus méritos profesionales.