Ciudad del Vaticano
“Una caricia del Papa Francisco a quienes se encuentran en necesidad”, así definió la Elimosneria Apostólica la iniciativa del Pontífice, de distribuir miles de helados a los pobres que son asistidos en diversas estructuras romanas, para festejar su onomástico, en la memoria litúrgica de San Jorge, mártir.
Probablemente serán distribuidos más de tres mil helados, a lo largo de todo el este día, en los comedores, en las casas de acogida, en los dormitorios, en los centros de Caritas, y también en las estructuras de San Egidio y del Centro “Astalli”.
Se trata de un pequeño gesto – explica la Elimonseria Apostólica – pero que los pobres reciben siempre con mucha alegría porque saben que proviene del corazón y se sienten considerados por el Papa, a quien agradecen y oran por él.
