Campanas/Bolivia Misionera/“El tema conlleva un gran desafío, el de ponernos delante del Dios de la vida para redescubrir desde Él, en el hoy, ésta llamada a vivir una de las dimensiones de nuestra vida como misioneros, la de ser profetas”, la Hermana Cilenia Rojas, Misionera Cruzada de las Iglesia compartió este tema invitada por la Vicaría Virgen de Guadalupe en el marco de la celebración del Domund en este octubre misionero.
La religiosa recordó el proceso de preparación al V Congreso Americano Misionero, donde uno de los ejes temáticos era profetismo: “Hemos soñado juntos que la alegría del evangelio, corazón de la misión profética, fuente de reconciliación y comunión llegue a todos y sea real”. “Hablar de profetismo misionero es volver a la Palabra de Dios y recordar como el señor desde el principio quiso contar con profetas para anunciarnos buenas noticias y ponernos en su presencia”
La Hermana Cilenia explicó que los rasgos de un profeta son: “Un profeta es aquel capaz de ver, abre sus ojos y corazón al mundo, un misionero y profeta no estrecha su vista y corazón, es una persona capaz de ayudar, es capaz de ponerse en disposición y decir aquí estoy, es capaz de escuchar a Dios y así mismo, es un discípulo misionero, lo fundamental es la Palabra de Dios, y eso no debemos arrancar de nuestra vida en ningún momento”.
En relación a la realidad que Bolivia vive hoy, enfrentando a la pandemia manifestó: “Me siento muy unida a todo lo que vive mi gente en este momento, político, social, eclesial y verdaderamente, yo creo que no debemos dejar que nuestros corazones se estremezcan, no podemos estar al margen de todo lo que vivimos, el mundo nos ha presentado una realidad inesperada incierta, un virus que sigue rondando, nos ha puesto en un ritmo acelerado, y desesperado de no saber qué hacer, esta pandemia nos ha puesto límites, como taparnos la boca a los misioneros con un barbijo, son signos de los cuales nos están hablando y diciendo algo y no podemos nosotros como discípulos misioneros quedarnos indiferentes”.
A continuación la religiosa explica cómo vivir el profetismo misionero:
