Campanas. “Hagan de ésta Iglesia una Comunidad viva”, pide Arzobispo de Santa Cruz, Mons. Sergio Gualberti, en la bendición de la Capilla San Juan XXIII Mater et Magistra.
El domingo 01 de diciembre, primer domingo de Adviento, Mons. Sergio Gualberti, Arzobispo de Santa Cruz, recibió las llaves de la nueva Capilla San Juan XXIII Mater et Magistra, la misma que pertenece a la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de la zona de los Chacos. Luego de la entrega de las llaves en la puerta de la Iglesia, primero ingresó el Arzobispo, acompañado de los Concelebrantes; P. Marcial Chupinagua, y el P. Humberto Lira y toda la coimunidad que se dió cita para celebrar este gran día.
Rito de bendición en fotografías
ENTREGA DE LAS LLAVES DEL TEMPLO AL ARZOBISPO EN LA PUERTA PRINCIPAL
Ingresa en la Capilla el Arzobispo, acompañado de los Concelebrantes y demás personas, mientras la Comunidad Canta
Cuando la procesión llega al presbiterio, el obispo, sin besar el altar ni incensarlo, va directamente a la sede
Terminado el canto de entrada, el obispo deja el báculo, se quita la mitra y saluda al pueblo
BENDICIÓN Y ASPERSIÓN DEL AGUA: Se bendice el agua. Con dicha agua el Arzobispo rocía bendice toda la Capilla , signo nos permite recordar nuestro bautismo y nuestra constante actitud de penitencia que debemos tener. El agua purifica los muros de esta nueva Iglesia.
El P. Marcial Chupinagua, Párroco de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de la zona de los Chacos, a nombre del P. Humberto Lira, el P. Javier y de toda la Comunidad de la Capilla San Juan XXIII Mater et Magistra, dio la bienvenida al Arzobispo de Santa Cruz.

Procesión con la Biblia y es entregada al Señor Arzobispo
Entrega al ministro lector el leccionario quien lo lleva en alto hasta el ambón, allí se proclama la palabra de Dios
PROCLAMACIÓN DEL SANTO EVANGELIO
HOMILÍA DE MONSEÑOR SERGIO, ARZOBISPO DE SANTA CRUZ: “Hagan de ésta Iglesia una Comunidad viva”, pide Arzobispo en la bendición de la Capilla San Juan XXIII Mater et Magistra.
BENDICIÓN DEL ALTAR
Queridos hermanos, nuestra comunidad se ha reunido, llena de alegría, para la bendición de este altar. Asistamos a este rito con la máxima atención y pidamos a Dios que mire con agrado la oblación de la Iglesia, que será colocada encima de este altar, y que haga de su pueblo una ofrenda permanente para gloria suya.
Después de consagrado se cubre el altar con el mantel
Procesión de las ofrendas: vino y pan
CONSAGRACIÓN DEL PAN Y EL VINO
COMUNIÓN
BENDICIÓN FINAL