Campanas. Después de 8 meses y  desde que inició la Pandemia del Covid- 19, el Padre Juan Kukla,  Párroco de la Parroquia Nuestra Señora Mercedes, llegó hasta la Cárcel (CERPROM), Centro de Readaptación Productiva de Montero, para celebrar una misa con los privados de libertad.

Los privados de libertad expresaron espontáneamente su alegría de tener nuevamente un sacerdote que los visite y que les lleve la palabra de Dios. A pesar de las restricciones, fue imposible no extender la mano o rechazar un abrazo de estos hermanos,  que estaban necesitados de recibir un mensaje de esperanza y paz.

La ausencia de la Iglesia en este lugar  se debió a las restricciones sanitarias por la Pandemia del Covid- 19, y para precautelar la salud y la vida de estos hermanos privados de libertad y de los Sacerdotes y religiosos  que constantemente llegan hasta este centro de rehabilitación  para expresar su cercanía y apoyo.

  En la actualidad en la cárcel de Montero, hay más de 600 presos y el riesgo del contagio es muy alto. La Misericordia de Dios estuvo presente más que nunca en este lugar, ya que no se presentó ningún caso de Coronavirus. También hay que agradecer y destacar el gran trabajo que han realizado  los policías de esta carceleta, para  cuidar la vida de los privados de libertad, que se encuentran  en este lugar.

En la ocasión también  se bendijo el  nuevo pabellón destinado para mujeres, que serán trasladadas de la carceleta de Montero. La fraternidad  de la Parroquia Nuestra Señora de las Mercedes colaboró en la obra fina, regalando tres equipos completos de baño (tasas, lavamanos, duchas) y por supuesto varios metros cuadrados de azulejo para revestir las paredes de los baños.

La parroquia Nuestra Señora de Las Mercedes a través de los voluntarios y bienhechores dentro del programa de la “Pastoral Penitenciaria”, trabaja arduamente para ayudar y llevar adelante proyectos que beneficien a los privados de libertad, tanto  en la Cárcel como en la Carceleta de Montero.

La P. Nuestra Señora de las Mercedes es atendida por los Religiosos Franciscanos Conventuales.