Con el objetivo de recaudar fondos para el mantenimiento del Centro de Rehabilitación de Niños Quemados (CERNIQUEM), el 8 de agosto, se llevó a cabo en el Hotel los Tajibos, la cena solidaria “Pan y Vino”, organizada por el Comité de damas del Rotary Club Santa Cruz y Cerniquem.
Mons. Estanislao Dowlaszewicz, Obispo Auxiliar, a nombre de la Iglesia Católica de Santa Cruz, participó de la Cena solidaria Pan Y vino, en su intervención aseguró que el mundo no será mejor porque haya menos personas enfermas, menos personas débiles, menos personas frágiles o ancianas de quien ocuparse e incluso no porque haya menos pecadores. El mundo será mejor cuando sean más personas que, como ustedes aquí reunidos, estén dispuestos y se animen a gestar el mañana, a creer en la fuerza transformadora del amor de Dios para aliviar el dolor, el sufrimiento a estas personas más pequeñas e indefensas que necesitan verdaderamente de todos ustedes su apoyo, su colaboración, expresó.
Monseñor también mostró su preocupación, frente a la realidad que se vive en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, ya que aproximadamente 22.399 niños y jóvenes, anualmente sufren quemaduras, de los cuales 5.151 son menores de 15 años que presentan lesiones moderadas y, de estos 1.545 son niños que sufren quemaduras graves y deben internarse en él un centro especializado (Hospital de Niños Dr. Mario Ortiz Suárez). Todos estos niños que se hospitalizan posteriormente requieren recibir atención. “A lo largo de 13 años del voluntariado al servicio de los más necesitados se ha atendido a más de 3.360pacientes. Eso quiere decir que aproximadamente hay un flujo de 250 pacientes nuevos por año.”
El Obispo Auxiliar de Santa Cruz, exhortó a los presentes a dejar que Dios renueve su corazón. Al mismo tiempo invitó a todos los que se dieron cita en el Hotel Los Tajibos a decir “sí” al Señor, a abrazar la vida como viene con toda su fragilidad y pequeñez. Jesús abrazó al leproso, al ciego, al paralitico, abrazó al fariseo y al pecador. Abrazó al ladrón en la cruz e incluso abrazó y perdonó a quienes lo estaban crucificando. Solo lo que se ama puede ser salvado. Solo lo que se abraza y ama puede ser trasformado y sanado, dijo Monseñor.
No tengan miedo de abrir el corazón para que el Señor renueve el fuego de su amor, que los impulse a abrazar la vida del otro con toda su fragilidad, con toda su pequeñez, pero también con toda su grandeza y hermosura. Que Jesús los ayude a descubrir la belleza de estar vivos y despiertos, generosos y solidarios, manifestó el Prelado.
Estando frente a Jesús, cara a cara, anímense, no tengan miedo de abrirle el corazón para que Él renueve el fuego de su amor, que los impulse a abrazar la vida del otro con toda su fragilidad, con toda su pequeñez, pero también con toda su grandeza y hermosura. Que Jesús los ayude a descubrir la belleza de estar vivos y despiertos, generosos y solidarios, expresó.
Jesús nos jala, empuja para que entremos al cielo atreves de los enfermos. En nuestro caso de hoy, a través de los niños inocentes quemados o personas mayores quemadas. Dios actúa en nosotros para ayudar a los demás. Si no vives como crees, crees como vives concluyó
Cerniquem es un centro innovador, especializado en la prevención y atención integral a pacientes con secuelas de quemaduras, sin costo para las familias, reconstruyendo sueños y mejorando la vida de las personas, reinsertándolas a la sociedad con dignidad.
Es el único centro para rehabilitación de quemados en el país. Una institución sin fines de lucro de carácter social que fue creada en el año 2005, para hacer realidad y llevar adelante un proyecto del Rotary Club Santa Cruz de la Sierra, con el fundamental apoyo del Comité de Damas Rotarias.
Desde el mismo momento en que se concretó la obra, nació el voluntariado, hoy con 13 años al servicio de los más necesitados. Hasta la fecha el centro ha atendido a más de 3.360 pacientes pacientes que inician tratamientos de rehabilitación y aproximadamente un flujo de 250 pacientes nuevos por año.
La realidad del paciente quemado lamentablemente está en relación al nivel socio económico. Generalmente son personas de escasos recursos los que sufren este tipo de lesiones, en la institución no se realiza ningún tipo de distinción son atendidos de manera oportuna y desprendidamente a todos los pacientes que así lo requieren.