Campanas. El Consejo Boliviano de Laicos mediante una misiva dirigida a Monseñor Aurelio Pesoa, Presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana y a todos y cada uno de los obispos presentes en la CXI Asamblea Plenaria de la CEB, expresan su preocupación por la difícil situación que atraviesa nuestro país, con una sociedad polarizada, confrontada y violentada.
Así mismo en este escrito el Consejo Boliviano de Laicos afirma que, Nuestros gobernantes incumplen la misión que se les delegó cuándo fueron elegidos para dirigir los distintos destinos de nuestra nación; cumplir y hacer cumplir la Constitución y las Leyes que rigen a todos los ciudadanos, puesto que las transgreden permanentemente, exacerbando así la paciencia de un pueblo consciente de sus derechos y obligaciones.
Ante descomunal atropello a las libertades con que nuestro buen Dios irrenunciablemente nos concedió, acudimos a ustedes como única Institución confiable y creíble, como única reserva moral del país bien representada en cada uno de ustedes, para que, justamente con el Anuncio de la Buena Nueva proclamada por sus labios, sigan denunciando las mentiras y manipulaciones a las que someten a los bolivianos, sorprendiendo la inocencia y buena fe de un pueblo noble, que aún no termina de discernir lo que es bueno a los ojos de Dios y lo que es distorsionado con fines particulares, dice parte de la misiva.
Misiva Completa
Apreciado monseñor Aurelio Peso, Presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana y a todos y cada uno de los obispos presente en la CXI Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Boliviana, reciban un fraternal saludo del Consejo Boliviano de Laicos.
Mirando la difícil situación que atraviesa nuestro país, con una sociedad polarizada, confrontada y violentada, nos recuerda la fratricida confrontación de Caín y Abel, con la diferencia que son los Padres de la Patria los que azuzan a sus hijos a rechazarse unos a otros.
Nuestros gobernantes incumplen la misión que se les delegó cuándo fueron elegido para dirigir los distintos destinos de nuestra nación; cumplir y hacer cumplir la Constitución y las Leyes que rigen a todos los ciudadanos, puesto que las transgreden permanentemente, exacerbando así la paciencia de un pueblo consciente de sus derechos y obligaciones.
Ante descomunal atropello a las libertades con que nuestro buen Dios irrenunciablemente nos concedió, acudimos a ustedes como única Institución confiable y creíble, como única reserva moral del país bien representada en cada uno de ustedes, para que, justamente con el Anuncio de la Buena Nueva proclamada por sus labios, sigan denunciando las mentiras y manipulaciones a las que someten a los bolivianos, sorprendiendo la inocencia y buena fe de un pueblo noble, que aún no termina de discernir lo que es bueno a los ojos de Dios y lo que es distorsionado con fines particulares.
Podemos afirmar con absoluta certeza, que en el laicado católico existe un yacimiento inagotable de fe genuina, capaz de sostener en oración constante, la esperanza que nos anima a entregarnos confiadamente a los designios de nuestro Señor Jesucristo, para que, con el apoyo de ustedes, volvamos a vivir días de tranquilidad y prosperidad para todos los habitantes de nuestro país, sobre todos los más pobres y desvalidos qué son los que más están sufriendo y con esta situación.
Humildemente pedimos que todos ustedes nuestros Pastores reunidos en esta Magna asamblea, bendiga a gobernantes y gobernados para que el Espíritu Santo guíe nuestra historia por sendas de paz y justicia y con la bendita intercesión de María Santísima obtengamos la Misericordia de Dios Padre Todopoderoso.
Santa Cruz 10 de octubre de 2022
Sandra Serrano de Dick
Presidente del Consejo Boliviano de Laicos
“C.B.L.