El pasado 8 de enero, fiesta del Bautismo del Señor, fue publicado el motu proprio “Spiritus Domini”. Se trata de una modificación del canon 230, del Código de Derecho Canónico hecha por el Papa Francisco y que hace referencia al acceso de las mujeres al ministerio del lectorado y el acolitado. Monseñor Eugenio Coter, obispo del Vicariato Apostólico de Pando en Bolivia, reflexiona sobre este cambio.
En la carta, el Pontífice establece que las mujeres pueden acceder a estos ministerios y que se les atribuye también mediante un acto litúrgico que las institucionaliza.
Y precisamente, Monseñor Coter, fue el encargado de solicitar formalmente este cambio al Papa en nombre de los participantes del Sínodo de la Amazonía celebrado en Roma del 6 al 27 de octubre de 2019.
En este contexto, Monseñor Coter explica que el hecho de que el Papa firmara este Motu Proprio el 10 de enero de 2021, solemnidad del Bautismo del Señor, es especialmente simbólico:
Gesto que valora la dimensión ministerial del bautismo
“Creo que ha sido una ocasión muy importante para recordar que el Lectorato y Acolitado como ministerialidad en la Iglesia tiene su fuente en el bautismo y el abrir estos ministerios a las mujeres, además de a los hombres como era la tradición, ha sido el esfuerzo de leer en el la realidad de hoy la tradición de la Iglesia, como una realidad que ilumina el presente”.
Además, el prelado hace hincapié en que con este gesto concreto se valora la dimensión ministerial del bautismo en hombre y mujeres.
Una Iglesia que acoge
Por otra parte, el obispo del Vicariato Apostólico de Pando recuerda que este “es un signo de una Iglesia que acoge lo que vienen pidiendo desde la realidad, los obispos y las comunidades cristianas”.
Ciertamente, esta modificación ya se ejercía antes del Motu Proprio del Papa, pero Monseñor Coter señala que el hecho de “afirmarlo jurídicamente es darle oficialidad a esta ministerial esta igualdad entre hombre y mujeres a partir del sacerdocio común del bautismo”.