Campanas. Este domingo 19 de febrero desde la Catedral, el Arzobispo Metropolitano de la Santa Cruz, expresó su preocupación por la muerte de los niños a causa del dengue, así mismo cuestionó a las autoridades ¿Qué están haciendo por ellos las autoridades? ¿No escuchan el clamor de los padres?
Luchar por hacer bien las cosas, porque ahí está la perfección y no pensar en vengarse, en el odio, en el mal.
Cuaresma es tiempo de mirarnos a nosotros mismos, mirar nuestra relación con Dios y mirar la relación con los demás.
Nuestras calles hechas un monte, ¿los parques? ¿las escuelas? ¿Será que no hay alguien que se pueda hacer cargo de esto?
Policía: Trajeron refuerzos para llevarse a la autoridad local, porque no traen refuerzos para hacer algo con los avasalladores.
A alguien le corresponde hacer todo esto, buscar la unidad, buscar justicia, buscar el bienestar de todos.
Oren por sus enemigos, oren por las autoridades, oren por aquellos que no piensan igual, pero oren.
Homilía de Mons. René Leigue Cesarí
Arzobispo Metropolitano de Santa Cruz
19 -2 – 2022 – Catedral de Santa Cruz
“Sean perfectos como su Padres es perfecto” es la frase que hemos escuchado en las lecturas. Un cordial saludo a todos los presentes y a todos los que nos siguen por las redes sociales y a través de los medios de comunicación, especialmente a los enfermos.
Hay que amar a Dios y amar al prójimo, ahí se manifiesta la perfección
Hemos escuchado estas lecturas en las cuales el Señor nos sigue instruyendo en lo que tenemos que hacer, y es esa la Palabra de Dios, escuchar al Señor, es escuchar algo que nos dice, para seguir mejorando, y eso nos dice hoy. El Señor habla a Moisés que le hable al pueblo, que trabajen y luchen cada día por ser perfectos, y ¿Qué hay que hacer para ser perfectos? La lectura dice que hay que amar, hay que amar a Dios y amar al prójimo, ahí se manifiesta la perfección, porque no hay cosa más grande que nosotros podemos hacer o podemos manifestar en nuestra vida, es eso, el amor que le tenemos a Dios, y ese amor que él nos tiene, ese mismo amor se debe derramar en el prójimo, y eso es lo que nos dice en las lecturas.
Amar al prójimo ¿qué significa? No ser vengativo con sus compatriotas, ni guardarles rencor.
Amar al prójimo ¿qué significa? No ser vengativo, que importante es esto, porque nosotros cuando nos pasa algo, cuando tenemos alguna situación difícil con alguien, lo primero que nos viene a la mente es eso, la venganza, y si no nos vengamos nosotros, con nuestras propias manos ¿qué hacemos? Le deseamos el mal, ojalá le vaya mal a esta persona, eso es venganza y aquí dice el Señor que no, no tenemos que cargar con problemas de otro, más bien tenemos que acercarnos a esa persona para hacerle notar sus errores, y de esa manera no llega la venganza, peor todavía entre nosotros, como personas, como cristianos y como compatriotas, dice aquí la lectura, no tienen que ser vengativos con sus compatriotas, ni le guarden rencor, mas bien Ámenlo, respétenlo. Esta es la palabra del Señor, estas son las instrucciones que el Señor nos da, esto es lo que debemos hacer, y continúa el Evangelio diciendo; ustedes ha oído que se dijo “Ojo por ojo y diente por diente”, es decir como todo lo que tú me has hecho, de la misma manera te voy a responder, pero si embargo continúa el Evangelio diciendo; pero YO les digo, no hagan frente al que les hace mal, al contrario, estén más bien de su lado, caminen con ellos, no se alejen de ellos.
En muchos casos se puede salvar una relación, no respondiendo a un momento tenso
Esto que el Señor nos dice, muchas veces, lo que nosotros hacemos, hay cosas que decimos, NO se porque lo hice, no se porque lo dije, lo dije en un momento de rabia, no me sentía bien, por eso dije eso, pero ese arrepentimiento viene después, y en muchos casos se puede salvar una relación, no respondiendo a un momento tenso. De la experiencia que tenemos nosotros, como familia, como esposos, en muchas ocasiones han salvado un momento de mayor problema, NO respondiendo, porque no es el momento para responder, se buscara otro momento eso es lo que nosotros no somos capaces de hacer, empezamos a gritarnos, a decirnos cosas y mientras más grita uno, el otro responde, y al final un problema que era pequeño, se vuelve tan grande y después es difícil volver atrás.
El Señor nos dice; en vez de odiar, ama a tu enemigo. Rueguen por sus enemigos, rueguen por sus perseguidores, así serán hijos del Padre
El Señor hoy nos dice que no hay que hacer más grande el problema, continúa el Señor diciendo; ustedes han oído que se dijo; “Amaras a tu prójimo y odiarás a tu enemigo”, si nosotros analizamos esto, es lo que vivimos cada día, hace que tiempo el Señor nos ha hablado de esta manera y preguntémonos ¿hemos avanzado algo? Yo creo que sí, pero nos falta mucho y si hemos avanzado, somo algunos lo que hemos entendido que significa lo que dice el Señor, pero hay otros que no, siguen en las mismas, o peor y peor todavía cuando se recuerda siento de años atrás, 100, 200, 500 años y siguen recordando eso, tratando de vengarse de algo que a lo mejor nadie de nosotros hemos conocido o ha vivido, pero todavía, pero sin embargo va ahí, y eso es lo que el Señor nos dice; en vez de odiar, ama a tu enemigo, que difícil, que complicado podemos decir nosotros, y de hecho es así, ¿quién es capaz de amar a alguien que le hace mal? Nos cuesta es verdad, pero no es imposible, si realmente nosotros queremos hacer el bien, queremos estar bien más que todo, tenemos que dar ese paso, el que quiere estar bien, es el que da el primer paso ¿cuántas veces nos hemos quedado así, cuando hay problema con alguien? Es que él empezó, que él me pida disculpa, yo no hice nada, y sin embargo a lo mejor fue él que peor respondió ante una ofensa y se siente que no es culpable. Es ahí donde se agrava el problema, y eso es lo que nos dice el Señor; hay que evitar eso y en vez de odiar, más bien ama a tu enemigo, y de qué manera tenemos que hacerlo, dice; rueguen por sus enemigos, rueguen por sus perseguidores, así serán hijos del Padre que está en el cielo. Si verdaderamente nosotros entendiéramos eso, hiciéramos lo que el Señor nos dice, cambiaríamos la realidad que vivimos.
Todos somos buenos, que tenemos errores sí, es por eso que el Señor nos llama a la perfección
Que es lo que renegamos, que hay tantos problemas, odio por aquí, ¿pero ¿qué hacemos? ¿qué pasos damos? Si no somos capaces de hablar con las personas que no estamos bien, peor va ser todavía que oremos por ellas y esperemos que, si se hace, no sea un a oración para que le vaya mal, que ahí lo arruinamos todo. Hay que pensar siempre bien del otro, no tenemos que quedarnos así, que hay una persona mala, todos somos buenos, que tenemos errores si, es por eso que el Señor nos llama a la perfección “Sean perfectos, como su padre es perfecto”, estamos camino a eso, cada día hay que buscar, poner nuestro esfuerzo para ser perfectos. A eso el Señor nos invita hoy, a caminar, a aceptar nuestra realidad, a aceptar aquel con el cual no estamos siempre bien.
Si Saludan solamente a aquellos hermanos con los cuales ustedes se llevan bien ¿qué hacen de extraordinario?
Si ustedes aman solamente a quienes los aman, ¿qué recompensa tendrán? ¿Qué recompensa hay si solamente uno se puede llevar bien con aquel que me cae bien? Y solamente se les llama hermanos a aquellos que son de mi grupo, a aquellos con los cuales yo coincido, a aquellos que dicen solamente lo que quiero escuchar, ¿solo a ellos les llamo “hermanos”? ¿Y los demás qué? ¿Son enemigos, seguro no? si no son hermanos. Y aquí el Señor dice ¿Qué recompensa van a encontrar si solamente están de acuerdo y aman a aquellos con los cuales ustedes se llevan bien? ¿Qué recompensa recibirán después? ¿No está el mayor desafío ahí? ¿No hacen lo mismo los publicanos? Si Saludan solamente a aquellos hermanos con los cuales ustedes se llevan bien ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen lo mismo los paganos?
La lluvia cae sobre todos, el solo sale cada día sobre todos y ahí se manifiesta el amor de Dios
Esta es la palabra del Señor Él nos invita a nosotros a ver nuestra vida, nuestra realidad, ¿Por qué tenemos tantos problemas? ¿Por qué tanta situación negativa? ¿Por qué no escuchamos a Dios? Y cada vez nos estamos alejando de Él por mirarnos solamente a nosotros mismos. El evangelio nos dice: “Dios es tan bueno que hace caer la lluvia sobre todos y hace salir el sol sobre todos” Disfrutan inclusive aquellos que no creen en Dios, disfrutan de la lluvia, tienen el día y entonces ese es Dios que no anda escogiendo así: “bueno en esta ciudad me aman, es más cumplen lo que yo les digo, a ellos les voy a dar todo. A esta otra ciudad como son enemigos como no creen en mí, no les doy nada” Pero la lluvia cae sobre todos, el sol sale cada día sobre todos y ahí se manifiesta el amor de Dios a todos, no escoge, Dios hace llover y hace salir el sol sobre todos.
Luchar por hacer bien las cosas, porque ahí está la perfección y no pensar en vengarse, en el odio, en el mal.
Solamente somos nosotros que escogemos con quién llevarnos bien y a quién hacer el bien y decimos: “si están conmigo la pasan bien y si no verán las consecuencias” Solamente los humanos pensamos eso, Dios no. Y eso es lo que quiere hacernos entender, por eso es que nos llama a la perfección: “sean perfectos como su padre es perfecto”. Ese es un desafío para nosotros, eso sí, cada día hay que hacer eso, cada día hay que luchar por hacer bien las cosas, porque ahí está la perfección en hacer bien las cosas y no pensar en vengarse, no estar pensando en el odio, no estar pensando en hacer mal al otro, no estar pensando cómo dañar a la otra persona. Y estamos en eso, de estar pensando siempre mal del otro. ¿Qué esperamos? ¿Qué recompensa esperamos?
Cuaresma es tiempo de mirarnos a nosotros mismos, mirar nuestra relación con Dios y mirar la relación con los demás.
Creo que debemos tener en cuenta esto, estamos a punto de entrar a un tiempo que nos da la Iglesia y nos da Dios, un tiempo de reflexión, tiempo de mirarnos a nosotros mismos, mirar nuestra relación con Dios, mirar la relación con los demás. Ese es el tiempo de Cuaresma, empezamos el miércoles de ceniza. Entonces el Señor ya nos va diciendo, por dónde tenemos que caminar, qué es lo que tenemos que hacer.
Con el dengue los que están sufriendo más son los niños. ¿Qué están haciendo por ellos las autoridades?
En este tiempo no estamos muy bien, vivimos tiempos complicados con esto de la salud, con el dengue. Los que están sufriendo más son los pequeños. Es una lástima ver niños que están sufriendo y muriendo, aquellos que no pueden manifestar dónde le duele, qué es lo que le está pasando, son ellos los que están sufriendo. ¿Qué se está haciendo por ellos nuestras autoridades? ¿será que no escuchan el clamor de los papás? ¿Será que no ven la realidad que estamos pasando? Y al parecer no se está haciendo nada. Los niños ¿dónde están metidos en el hospital? No hay un lugar digno, no hay un espacio apropiado para ellos, y cada día ese es el reclamo de los papás, es difícil vivir una situación así.
Nuestras calles hechas un monte, ¿los parques? ¿las escuelas? ¿Será que no hay alguien que se pueda hacer cargo de esto?
Cómo están nuestras calles, hechas un monte, ¿los parques? ¿las escuelas? ¿Será que no hay alguien que se pueda hacer cargo de esto? estamos viendo eso. Entonces si se tiene el amor al prójimo, y si hay la oportunidad de que alguien haga eso ¿por qué no lo hace si está en sus manos hacerlo? Eso es tener amor al prójimo, eso es hacer lo que el Señor nos dice: Ama a tu prójimo, haz algo por ellos, si está en tu mano, hace algo, hazlo ¡ya!
Policía: Trajeron refuerzos para llevarse a la autoridad local, porque no traen refuerzos para hacer algo con los avasalladores.
Pero ahí estamos, los problemas que tenemos, los avasallamientos que cada día escuchamos son noticias muy difíciles ¿Qué se está haciendo también por solucionar? Se habla que no vamos a permitir que alguien entre en propiedad privada, pero, sin embargo, siguen haciéndolo y ustedes se recuerdan que el fin de año cuando había ese momento tenso, cuando se han llevado a la autoridad local ¿Cuántos jóvenes iban por la policía para provocarlos? ¿Se recuerdan? Vinieron policías de otros lados para reforzar, y producto de eso hay muchos que están presos. Pero ahora ese grupo violento (avasalladores N.de R.) que ha castigado a los policías continúa, ¿por qué no se refuerza también a los policías trayendo gente de otros lados para poder hacer algo con esta gente?
Autoridades: Hagan algo, hay familias que están sufriendo, nosotros mismos estamos tensos y ¿qué va a pasar?
Estas son las cosas que uno dice: ¿Qué pasa? Para unos sí, fuerte, para otros no, a pesar de que los han hecho sufrir y se los ve que tienen armas también. ¿No se puede hacer algo más? Es ahí que uno queda desconcertado al ver qué es lo que está pasando con nuestras autoridades. Si dicen algo pues lleven adelante lo que dicen, hagan algo, hay familias que están sufriendo, nosotros mismos estamos tensos y ¿qué va a pasar?
A alguien le corresponde hacer todo esto, buscar la unidad, buscar justicia, buscar el bienestar de todos.
A ver cuando se vienen y entran en su casa y todas estas cosas, la violencia misma está por las calles. Es que uno a veces está inseguro, sale a la calle y no sabe si va a volver o no. Todas estas cosas que si escuchamos al Señor que nos dice: “Hay que amar al prójimo, hay que hacer algo por ellos, hay que ser perfectos, hay que buscar siempre el bien de todos”. A alguien le corresponde hacer todo esto, buscar la unidad, buscar la justicia, buscar el bienestar de los ciudadanos.
Oren por sus enemigos, oren por las autoridades, oren por aquellos que no piensan igual, pero oren.
Pidamos al Señor de verdad para que podamos vivir esto que dice el Señor, que hay que hacer el bien y como está el dicho: “hay que hacer el bien sin mirar a quién” Si hacemos eso y si hicieran eso aquellas personas que les toca hacer, las cosas van a mejorar. El Señor acá nos dice: “Oren por todos, oren por sus enemigos, oren por las autoridades, oren por aquellos que no piensan igual que ustedes, pero oren” Pidámosle al Señor que nos de esa fortaleza para poder hacerlo, para poder orar por todos y no solo por aquellos con los que nos llevamos bien y a los cuales tenemos que hacer el bien.
Que el Señor nos ayude, nos acompañe y el Espíritu de Dios nos de esa fuerza para no desfallecer. Sean Perfectos como Dios es perfecto.
Que así sea.